Vamos a hacer honor al famoso sacrificio de peón (tema de interesantísimas discusiones e incluso título de una película) con esta partida de Bobby Fischer contra Boris Spassky. Una jugada maestra, un sacrificio de peón de Bobby Fischer con el cual labró su victoria en esta partida (número 10) que fue parte del duelo por el Campeonato Mundial.
Una de las cosas más interesantes del duelo entre estos dos extraordinarios jugadores de ajedrez es que ha sido uno de los eventos históricos más importantes, no solo del ajedrez, ocurrido en los años 70.
Este duelo fue visto como un enfrentamiento entre Spassky, el jugador que tenía todo el respaldo de toda la Unión Soviética, y Fischer, el estadounidense “lobo solitario” apenas apoyado por un puñado de amigos. 🙂
Fischer y su método propio
Y, entonces, se vio cómo el método propio de Fischer (de preparación y juego) logró echar abajo toda la maquinaria soviética para conseguir arrebatarles el máximo título del ajedrez: ¡Bobby Fischer campeón mundial en 1972!
Con su preparación y métodos únicos para jugar ajedrez, Fischer consiguió una victoria aplastante, adornada por unas hermosas partidas.
Primera partida del Campeonato Mundial de 1972
Y, hablando de sacrificios de peones, también ocurrió que, en la primera partida del duelo, fue Fischer quien aceptó un sacrificio de peón (en una muestra de enorme ambición) y perdió la partida. Los estudiantes de ajedrez deberían conocer dicha posición.
Sin embargo, después de perder esa primera partida y no presentarse para la segunda, Fischer retornó, no con una victoria, sino con varias victorias apenas intercaladas por tablas, sin que Spassky pudiera remontar. ¡Y eso es parte de la hazaña de Bobby Fischer!
Lección en video
En la lección en video vemos una excelente partida de Bobby Fischer de la que se puede aprender bastante.
¿Cuánto se puede aprender de los campeones mundiales?
¡Muchísimo!
Muchos estudiantes y jugadores aficionados de ajedrez ven a los campeones mundiales y jugadores de élite, como Fischer, sólo como objeto de culto, y desechan las grandes posibilidades de aprender que ellos nos representan. Tomarlos como maestros nos brinda una perfecta oportunidad para progresar en nuestra propia forma de comprender y jugar el ajedrez.
¿Qué tanto puedes aprender de Fischer?
Ya lo veremos. Por el momento, déjanos tu opinión en los comentarios…