Para ser el mejor del mundo hay que tener una mentalidad extremadamente competitiva. Un jugador de esta talla no acepta burlas y siempre está dispuesto a darlo todo para ganar. En este artículo te quiero invitar a ver el análisis en video de una interesante y curiosa partida en la que se vio envuelto Magnus Carlsen.
Antes de seguir, queremos anunciar algo importante.
Ganadores de la clase por Internet
De acuerdo con nuestra promoción especial de fin de año, hemos seleccionado a dos estudiantes para recibir una clase de 1h por Internet con nuestro instructor Manuel Ocantos. Hicimos el sorteo entre los compradores de nuestros cursos del periodo del 24 de diciembre al 1° de enero. Y los felices ganadores son: Israel M. de Chile y Félix M. de México. A ellos los contactaremos pronto para acordar la fecha y tema de la clase.
Seguimos…
¡Carlsen cayó en una trampa de reglamento!
La partida que analizamos aquí tiene una apertura interesante con un gambito. Es una defensa siciliana. Se jugó en un Campeonato Mundial de Blitz. Carlsen tenía las piezas blancas y el juego fue muy táctico. También, por ser una partida rápida, los jugadores tenían que dejarse llevar mucho por su intuición.
Abruptamente, tras la jugada 27, ¡la partida terminó! Carlsen dio un jaque e Inarkiev respondió con otro. Carlsen movió su rey y perdió. Inarkiev reclamó que su rival había hecho una jugada ilegal.
Pero, ¡lo irónico del caso es que fue Carlsen quien finalmente ganó la partida!
Si quieres saber: ¿Qué fue lo ilegal que hizo Carlsen? ¿Cómo pudo perder y ganar en una misma partida? Te invito a ver el análisis en video.
Análisis en video
Manuel Ocantos ―instructor de la Academia de Ajedrez a Distancia― nos enseña esta polémica, pero bien jugada partida de Magnus Carlsen.
En el tablero
Los torneos de ajedrez están llenos de historias. Hay cosas desconocidas por muchos, pero inherentes a la competencia. Por eso, te damos unas recomendaciones:
- Conoce bien las reglas sobre las movidas ilegales en el torneo que juegas.
- Cuando tengas dudas, pregúntale al árbitro.
- Si no te gusta la decisión, ¡contacta al árbitro principal!
