El peón aislado de dama, también conocido con el alias de isolani, ejerce usualmente una profunda influencia sobre cualquier plan estratégico razonable donde esté presente. A veces este peón es toda una fortaleza y su dueño gana la partida no a pesar de éste, sino gracias a éste. Sin embargo, en este artículo, vamos a examinar el caso donde este peón significa más bien una desventaja.

La estructura del diagrama no es realmente representativa de todas las posiciones de medio juego que envuelven el isolani. El peón blanco puede estar en la columna ‘e’ en lugar de la columna ‘c’, y, claro está, los colores pueden invertirse. Sin embargo, este diagrama es de gran utilidad para nosotros porque la experiencia ha demostrado que ésta es una de las situaciones con isolani menos favorables. Esta posición surge de la variante Tarrasch de la Defensa Francesa y, según opina la teoría, las blancas tienen el potencial para mantener una mínima ventaja inicial desde la apertura.

Entonces, ¿cuáles son las desventajas del famoso isolani? Hay dos. Primero que todo, la ausencia de los peones vecinos significa que el isolani mismo es un objetivo de ataque. Por lo tanto, las blancas pueden desarrollar un plan para jugar contra éste. En segundo lugar, las casillas que rodean al isolani son vulnerables y las blancas pueden jugar alrededor de éste. Dado que estos dos planes son fundamentalmente diferentes, vamos a tratarlos en diferentes lecciones.

Jugando contra el isolani

Aquí la estrategia se dirige contra el propio peón. No es que las blancas esperen realmente ganarse el peón. Después de todo, las negras tienen tantos defensores como las blancas atacantes. Sin embargo, las blancas buscarán atar todas las piezas de su rival a la defensa del isolani. Vamos a comprobar que es mejor ser el atador que el atado.

1. d4 e6 2. e4 d5 3. Cd2 c5 4. exd5 exd5 5. Ab5+ Ad7 6. De2+ De7 7. Axd7+ Cxd7 8. dxc5 Dxe2+ 9. Cxe2 Axc5 10. Cb3 Ab6 11. Cbd4 Cgf6 12. Ag5 O-O 13. O-O-O Cg4 14. Ah4 Ad8 15. Ag3 Af6

A primera vista, puede parecer inútil para las blancas organizar un ataque directo contra el negro isolani. Si las blancas quisieran atacarlo con el caballo, las negras lo defenderían con su caballo también. Si las blancas quisieran doblar sus torres frente al peón, las negras también tendrían que doblar sus torres detrás. ¡Pero ojo! ¡Hay una gran diferencia entre lo que las blancas quieren hacer y lo que las negras tienen que hacer! Esto confiere a las blancas una de las ventajas posicionales más grandes del ajedrez. ¡Las blancas controlan el curso del juego!

Si Kan quiere atacar el isolani, la decisión es completamente suya. Si, en cambio, prefiere desplazar su atención hacia el flanco de rey (o hacia el flanco de dama), ¡no hay quien lo detenga!  Bondarevsky, en cambio, sólo tiene la libertad de moverse a donde Kan se lo permita. ☺

Indudablemente, las negras tienen suficientes recursos para defender su isolani o el flanco de rey  o el flanco de dama por separado. Pero la capacidad de las blancas para cambiar de un frente al otro su ataque terminará por copar todos los recursos de las negras más allá de lo posible.

16. Cf3 A Bondarevsky le fascinaría llevar su vagabundo caballo de regreso al centro con 16…Cge5, pero las blancas le han dado la orden: “Debes defender tu peón ‘d’”.

Entonces, 16…Cb6 17. h3 Ch6

La presión contra el isolani produce la primera ventaja para las blancas en el flanco de rey: la patética ubicación del caballo en h6.

Ahora las negras están listas a reparar su flanco de rey con 18…Cf5, por eso Kan agrega más peso alrededor del centro.

18. Cf4 Tfd8 19. Td3 Td7 20. Thd1 Tad8

Habiéndose defendido contra el asalto a su peón ‘d’, Bondarevsky busca de nuevo un respiro para jugar 21…Cf5. Kan, por lo tanto, mueve su atención de regreso al flanco de rey.

21. Ah2

Las blancas se preparan contra 21…Cf5 con 22. g4, mientras que las negras se ven enfrentadas a un nuevo problema: la amenaza de 22.g4 seguida por 23. g5

21…g6 22. g4 Ag7

¡Puf! A duras penas, Bondarevsky ha logrado sostener su posición del flanco de rey, pero no sin pagar su precio en el centro. El alfil negro ha abandonado la diagonal h4-d8, entonces: 23. Ag3! Kan pretende jugar 24. Ah4 para desviar una de las torres negras de la defensa del isolani.

23…f6 Forzado, tarde o temprano, para amortiguar Ah4 y proveer una ruta de escape para el caballo negro por g6. Pero ahora aparece una nueva debilidad en e6 (¡parece que hoy no es el mejor de los días para las negras! ☺)

24. Cd4! Cf7 25. Cde6 Ce5 26. Cxd8 Cxd3+ 27. Cxd3!

¿Qué fue esto? Las blancas eligen dejar de presionar al isolani.

27… Txd8 28. Cc5

¡Éste es el punto!

El dueño del juego ha creado un tercer campo de acción y éste es el frente que acaba con la resistencia de Bondarevsky. ¡El plan ha sido un éxito! Las negras se ven obligadas a perder un peón en el flanco de dama.

En el tablero

¿Aprendiste la lección? Al comienzo dijimos que existen dos planes principales para vencer al portador del isolani. Aquí estudiamos uno. Otro día veremos el otro…

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